Diputado Luis Alfonso Álvarez hace Llamado urgente a las comunidades educativas

Invito a las comunidades educativas de toda la región a verificar el estado de la infraestructura sanitaria y de servicios, prioritariamente de agua potable, de las instituciones académicas de Sucre, para que sólo de esa manera, cada padre de familia verifique sí existen las condiciones adecuadas para que sus hijos retornen presencialmente a clases.

Sabemos que la Secretaría de Educación del departamento de Sucre ha adelantado el acompañamiento necesario a las directivas de los colegios oficiales para que se ajusten a los requerimientos que demandas las medidas de bioseguridad que exige la prevención del virus que ocasionó la pandemia, pero no es menos cierto que muchos planteles especialmente los rurales están en total abandono y ruina como la IE de San Antonio, San Onofre y otras subregiones lejanas de la Capital.

Además, es pertinente recordar que una de las medidas obligatorias requeridas para el retorno de nuestros hijos a la escuela es que los planteles cuenten también con unas baterías sanitarias acordes con las exigencias de la emergencia en salud pública que vivimos.

De igual manera, estoy de acuerdo con la preocupación e incertidumbre que tienen los padres de familia, educadores, directivos y demás actores del sector frente a la posibilidad del contagio con el Covid 19 de sus hijos.

Sí bien es cierto, los menores de edad y jóvenes, según las investigaciones científicas y médicas podrían desarrollar con respecto al virus del Covid 19, una especie de gripa; sabemos que está misma población es vehículo para la transmisión de adultos. especialmente los de su núcleo familiar.

A su vez recuerdo a los padres de familia y tutores que son ellos quienes deben dar el consentimiento para que sus hijos regresen a las aulas de clases sino tienen comorbilidades ni están en riesgo de otro tipo.

De otra parte, invito formalmente a educadores, padres de familia, cuidadores y toda persona que tenga contacto con menores de edad, adolescentes y jóvenes en los planteles educativos, a practicar estrictamente las acciones de bioseguridad que permita asumir entre todos, la responsabilidad del retorno a la escuela como una experiencia segura y saludable.

Por último, invito a la cartera de Educación del departamento de Sucre, a reiterarle a los educadores y directivos del sector que identifiquen a tiempo para la respectiva delegación a las EPS y padres de familia o tutores asuman también su responsabilidad, de aquellos menores de edad o jóvenes que presenten mínimos signos de las consecuencias dejadas por la pandemia como la violencia familiar, ansiedad, depresión, predisposición a suicidio y la negación o afectaciones mentales ocasionadas por el duelo ante la pérdida de uno o varios miembros de la familia o de cercanos.
Diputado Sucre